En los negocios online hay un apartado que cada vez es más importante. Hablamos de la experiencia de usuario, un concepto que ha ido creciendo en los últimos años y que, como decimos, ya es de vital importancia en cualquier proyecto empresarial online que quiera tener una presencia fuerte y estable.
La experiencia de usuario en ocasiones suele confundirse con la usabilidad de una página web. Aunque son conceptos que están relacionados, no son lo mismo. La usabilidad es, como su nombre indica, la facilidad de uso de una herramienta en concreto. En la experiencia de usuario, por su parte, tendríamos que incluir la percepción, ya sea positiva o negativa, que esa herramienta ha generado en el usuario.
Por poner un ejemplo de una herramienta que todo el mundo puede visualizar correctamente, un martillo tendría una buena usabilidad si su peso es el adecuado, el mango tiene el grosor adecuado etc. Y la experiencia de usuario vendría determinada por cómo satisface las necesidades del usuario. Puede que el material del martillo haga que salten chispas al golpear determinadas superficies, o que tenga algún tipo de colorante y manche las manos.
Dentro del mundo online una buena o mala experiencia de usuario vendrá determinada por varios factores. Entre estos factores están la velocidad de carga de la página, el tamaño y color del texto, la facilidad para navegar por otras partes de la página, etc.
La importancia de la experiencia de usuario en la actualidad
La importancia de la experiencia de usuario en la actualidad viene marcada, como muchos otros puntos de la agenda digital, por lo que sugiere (u ordena) Google. Por supuesto que siempre hay personas interesadas en innovar y en ofrecer páginas web más intuitivas, con todos los apartados importantes bien visibles, etc.
Pero si la gran G dice que comenzará a valorar positivamente a las páginas con buena experiencia de usuario es evidente que se va a producir un aluvión de reformas y actualizaciones en las páginas de todo el mundo. Esto lo vimos en el pasado, cuando Google anunció que modificaría el algoritmo para dar prioridad a los sitios web que tuvieran sus páginas adaptadas para dispositivos móviles.
En los últimos tiempos Google ha ido implementando pequeños cambios en sus páginas y productos. Estos cambios tenían marcado un objetivo, hacer que la experiencia del usuario fuera más agradable. Así, podemos encontrar pequeños gifs en páginas sin contenido, por ejemplo cuando las notificaciones se han leído todas; velocidad de reproducción más lenta en el Google Translate la segunda que se intenta escuchar una expresión en otro idioma, etc.
Como vemos no todo lo referente a la experiencia de usuario está relacionado con aspectos técnicos. De hecho, una buena parte de la experiencia de usuario hace referencia a aspectos subjetivos, del diseño, etc. Google aplica estos pequeños cambios porque cree que aportan bienestar al usuario.
Y cuando Google comienza a aplicar una estrategia y esta termina teniendo buena acogida entre los usuarios, antes o después termina por ser ley. Así que los más adelantados ya están experimentando tratando de mejorar diferentes aspectos de sus páginas. El objetivo de estos cambios: que sus visitantes encuentren una página usable y que les deje buenas sensaciones.
La formación en experiencia de usuario
Y como no podía ser menos, la formación en experiencia de usuario también está creciendo considerablemente. En la actualidad podemos encontrar variados cursos y masters centrados en la experiencia de usuario. La oferta académica de este tipo de productos es creciente porque la demanda de los usuarios es también.
Los conocimientos técnicos son cada vez más demandados por las empresas que tienen presencia online. Contar con una formación en experiencia de usuario da al alumno más posibilidades de encontrar un puesto de trabajo.