¿Cómo afectará la victoria de Donald Trump a la actualidad económica?

¿Como afectará la victoria del candidato del partido republicano, Donald Trump, a la actualidad económica? En este artículo hacemos un breve repaso a su programa económico para tratar de conocer la actualidad económica afectada por la victoria de Trump.

 

Hace exactamente una semana, 8 de Noviembre de 2016, los ciudadanos de los Estados Unidos de América estaban eligiendo, entre otras cosas, a quién sería su presidente. Los candidatos eran varios, pero como siempre los más importantes, y los únicos con posibilidades reales de alzarse con la victoria, eran los candidatos de los partidos republicano y demócrata, y eso pese a que este año los libertarios han subido bastante en las encuestas e incluso el partido verde ha tenido algo de relevancia.

Con toda la prensa nacional en su contra, con todas las personas del famoseo en su contra, con los universitarios creyendo en los unicornios del dueto Obama-Clinton, etc. Con todas estas adversidades en contra, Donald Trump ha obtenido una aplastante victoria en distritos electorales, aunque ha perdido en número de votos. Si no hay cambios o imprevistos, Donald Trump será investido presidente el día 20 de Enero de 2017.

¿Como afectará la victoria de Trump a la actualidad económica? Es difícil saberlo, aunque podemos intuír algunas cosas.

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Algunos detalles de la política económica de Trump

Si queremos conocer la actualidad económica y como se verá afectada por la política económica de Trump debemos leer entre líneas. Trump ha usado y abusado del discurso fácil y esto, unido a la avalancha mediática a favor de Hillary, distorsiona bastante el mensaje.

Bajada de impuestos

Pese a que mucha gente pueda pensar lo contrario, Donald Trump ha propuesto una importante bajada de impuestos, para las empresas, pero también para toda la sociedad.

Por ejemplo, Trump ha prometido rebajar el Impuesto de Sociedad desde el 35 % actúal hasta el 15 %, nada menos que un 20% de descenso en el impuesto que pagan las empresas por ser eficientes.

Con esta medida Trump pretende atraer nuevas empresas, haciendo algo parecido a lo que han hecho estados como Irlanda, apostar por un impuesto de sociedades muy bajo, o más bajo de lo que hay ahora, para atraer nuevo capital y de esta manera aumentar el empleo.

Pero Trump también ha prometido una rebaja fiscal de hasta el 35% para todos los contribuyentes, independientemente del nivel de renta. Con esto pretende liberar los bolsillos de los sufridos contribuyentes y dejar su dinero en sus manos. Nadie administra mejor el dinero que sus legítimos dueños.

Trump también ha prometido un impuesto laxo en caso de repatriaciones de beneficios, una medida que parece estar hecha a posta para empresas como Apple o Google, que conservan una parte importante de sus beneficios en forma de efectivo fuera de los Estados Unidos, a la espera de que sean repatriados a los Estados Unidos cuando haya una legislación fiscal menos confiscatoria.

Obra pública con incentivos fiscales

Otra medida muy comentada es el proyecto que tiene Trump de invertir cerca de 1 billón de dólares en mejorar y actualizar las infraestructuras. El sector más liberal le ha atacado diciendo que esto es keynesianismo puro, aunque quizás esto no sea así del todo.

Y decimos que esto quizás no sea así del todo porque esta política parece que va a financiarse mediante incentivos fiscales a las empresas. Es decir, por lo visto serían las empresas privadas las que realizarían las obras de mejora y esto les generaría una serie de rebajas fiscales.

Estamos a la espera de conocer la actualidad económica de estas empresas y como les afectará esta propuesta de Trump, pero de entrada parece muy interesante.

¿Guerra arancelaria?

Trump parece dispuesto a aumentar las aranceles a la importación de determinados productos. No queda muy claro si esto es un farol para presionar al resto de países, sobre todo a China, a que se abran a políticas económicas más libres, o si va en serio.

El proteccionismo es un primer paso hacia las guerras, mientras que el liberalismo y el libre comercio son un garante de la paz. Desde este medio creemos que esta subida de aranceles es más que nada propaganda, aunque nunca se sabe.

También se comenta que esta medida se podría aplicar para compensar la bajada de impuestos y aumentar así los ingresos fiscales.